lunes, 30 de diciembre de 2013

Foie micuit


Hola amigos.
Mañana por fin, llega el último día del año, y lo tenemos que celebrar como dios manda.
Ha sido un año duro para algunos, muy duro para otros, regulin regulan para otros tantos...así que debemos decirle bye bye y recibir a un 2014 con muchas mas alegrías y cosas buenas que el que dejaremos atrás. Y así lo deseo para todos vosotros.
Como llevo muchos días subiendo recetas de dulces navideños, creo que ya va siendo hora de subir una receta de salado.
Hoy os voy a presentar una de mis debilidades, lo que mas me pierde y algo me encanta, a la hora de comer.
Algo que para mi, no puede faltar en una mesa, en cualquier celebración por pequeña que sea...
Una receta fácil como pocas, y que merece la pena hacerla en casa, ya que nos sale mucho mejor de precio comprar el higado entero, que la barra de foie en el supermercado.
Y mi receta del día, última receta de este 2013 es...

Foie micuit :

Ingredientes :

- Un hígado de pato fresco. También puede ser congelado.
- Un puñadito de sal
- Un chorro de coñac
- Pimienta negra molida


Para su cocción necesitaremos, papel film, papel de aluminio, y celo.

Pasos a seguir :

Comenzaremos sacando el hígado del envoltorio. Si es congelado, lo dejaremos descongelar en la nevera, y si es fresco, podremos utilizarlo directamente.
Mucha gente, lo templa un poco dentro del envoltorio en agua tibia, para trabajarlo.
Yo prefiero trabajarlo frío, ya que con el mismo calor que nuestras manos general al manipularlo, hacen que este, se vaya reblandeciendo. Así que no es necesario ablandarlo en agua.
En otras muchas recetas tradicionales, meten incluso el hígado en leche durante unas horas, para eliminar la poca sangre que tiene de las venas, pero en mi receta no nos complicaremos tanto y quedara igual de blanquito, limpio y rico.

El primer paso, será limpiar el hígado. Es el paso más costoso, y mas, para los que sois muy perfeccionistas como yo. Pero a medida que vayáis haciendo mas foie, cogeréis rapidez y lo trabajareis enseguida.
Un buen foie micuit debe estar libre de venas e hilos.
Lo abriremos por medio, y veremos una vena gorda, la vena principal, que une los dos lados del hígado. Poco a poco y con mucha paciencia, la retiraremos.




¿ Veis la vena que os decía ?
Una vez retirada, nos quedara el hígado separado en dos. Primero limpiaremos un trozo, y después el otro. Haciendo pequeños pedazos, y quitando las venitas que nos vayan saliendo.


Al desmigar el hígado, debemos hacerlo en trozos no demasiado pequeños, para que no se nos derrita y nos quede solo grasa.
Iremos limpiándolo poco a poco. Es preferible tardar 10 minutos más, pero eliminar todas las venitas y dejarlo completamente limpio, para que nos quede suave.


Ahora que ya tenemos el hígado limpio y desmigado, le añadiremos el resto de ingredientes.
Primero la sal y la pimienta.
Sé que no he puesto cantidades exactas, pero yo trabajo como las abuelas y las madres de antaño. Todo a ojo. Y mi medida en esta receta, es añadirle la sal, un poco por todo, como cuando le echamos la sal a un filete. Un puñadito por la parte de arriba, y listo. Después ya le daremos vueltas para unificarlo todo.
Y con la pimienta haremos lo mismo. Un poco por todo, como la sal.



Seguido, antes de mezclarlo todo, añadiremos un chorro de coñac. También podéis añadirle vino blanco, o vino dulce, incluso algún licor que os guste. Pero a mi como más me gusta es con coñac.
Solo tenéis que echar un chorrito, ya que si os pasáis, quedara demasiado blanda la mezcla, y os costara hacer las barras.


Una vez añadido el coñac, lo mezclaremos todo con las manos, pero sin aplastarlo ni marearlo mucho. Un par de vueltas para unificar los ingredientes y listo, puesto que si lo manipulamos demasiado, a la hora de cocerlo nos saldrá muchísima mas grasa.



Bien mezclados los ingredientes, dividiremos la mezcla en dos. Podemos hacer también solo una barra, pero es mejor hacer dos mas pequeñas, y si nos sobra una, mantenerla en el congelador.


Seguidamente, prepararemos las barras para ponerlas a cocer. La receta tradicional, es envolviendo las barras en un paño limpio, y poniendo el foie a cocer en caldo de carne, pero nosotros lo haremos de una manera mas rápida y sencilla e igual de exquisita.
A continuación, pondremos un buen trozo de film transparente en la encimera, y sobre este la barra de foie.
La envolveremos bien dandole dos, incluso hasta tres vueltas.



Y seguido, forraremos la barra con celo. Lo forraremos perfectamente dandole otras tres vueltas con el celo, para que no salga nada a la hora de cocer, pero sobre todo para que no entre agua.



Una vez forrado con el celo, pondremos otro trozo grande de papel de aluminio, y daremos dos vueltas envolviendo bien la barra.


Y volveremos a hacer lo mismo con el celo. Lo forraremos bien. Una vez forrado haremos lo mismo con la otra barra de foie micuit. Os recuerdo que yo siempre saco de un hígado, dos barras.


Este será el resultado.
Ahora, solo nos quedará ponerlos a cocer. En una cazuela grande, añadiremos abundante agua, y lo pondremos en el fogón a fuego alto. En el momento que rompa a hervir, añadiremos las barras durante 8 minutos si que deje de hervir. A mi esta vez, me han entrado las dos barras juntas. Otras veces, las he tenido que cocer de una en una.


Pasados los 8 minutos, sacaremos las barras y pondremos a escurrir el poco agua que echen.
Cuando ya estén lo suficientemente templadas, que las podamos manipular sin quemarnos, las pondremos en la encimera y las haremos rotar sobre si mismas para esparcer por todo el rulo la grasa que han podido sacar.
Y listo, lo meteremos en la nevera para enfriar.
Cuando lleve unas dos horas en el frigorífico, daremos las vueltas a las barras, para que la grasa se endurezca de manera igualada por toda el rulo por arriba y por abajo.
Al día siguiente, ya podremos consumirlo. Cortaremos con una tijera todo el envoltorio y ya lo tendremos listo para servir, incluso hacer algún montadito con el propio foie.
Este, es el resultado.


 ¿ Que os parece ? Para mi, uno de los mayores manjares que existen, con cientos de posibilidades, pudiéndolo degustar tal que así, con mermelada, como acompañamiento para carnes, en montaditos y pintxos...
Todo un placer y una delicia para el paladar. Uno de los alimentos mas exquisitos bajo mi punto de vista.
Espero que os guste mi receta, y mis explicaciones. Ojalá la probéis y os encante. y si tenéis alguna duda, solo tendréis que preguntármelo aquí o en el correo de titxenfood.
Esta ha sido mi receta de hoy y espero que os guste.


Feliz año nuevo amigos. Os deseo una feliz entrada al 2014.






sábado, 28 de diciembre de 2013

Polvorones de chocolate.

Hola de nuevo amigos, aquí viene la otra receta de polvorones.
He preferido ponerlas separadas, para mayor comodidad a la hora de leer cada una de las recetas.
Vamos allá.

Polvorones de chocolate :

Ingredientes :

- 350 gr de harina
- 90 gr de almendra cruda molida
- 90 gr de azúcar glass
- 120 gr de manteca de cerdo ibérico
- 9 onzas de chocolate de hacer, de la marca valor
- azúcar glass para decorar



























Pasos a seguir :


Ahora que nos toca la receta de los polvorones de chocolate, seguiremos los mismos pasos que en la de canela y limón, pero cambiando estos dos últimos ingredientes, por el chocolate.
Aún así, recordaremos los pasos uno a uno, por si no habéis leído la receta anterior.

Preparación previa.

Ponemos en una bandeja de horno, los 350 gr de harina con la almendra cruda molida, y con el horno precalentado. Lo meteremos a 130º durante 30 minutos, removiendo de vez en cuando.
Pasado el tiempo, tendremos la mezcla ligeramente tostada, y podremos sacarla del horno para dejarla reposar.
No debemos tenerla mas de esos 30 minutos, ya que la harina y la almendra podrían amargarse.
Fuera del horno, lo dejaremos reposar de un día para otro.


Amasado y horneado.

Al día siguiente, pondremos la mezcla en un bol, y formando un volcán, pondremos en el centro todos los demás ingredientes.
El azúcar, la canela, y las 9 onzas de chocolate de hacer ligeramente fundido en el microondas.


Mezclaremos con las manos, y en esta mezcla, no nos hará falta añadir mas manteca, ya que con el chocolate, quedará mas blandita.
La bola nos quedará de por sí algo mas blanda, pero no tendremos problemas para darle forma.


Seguidamente, con un rodillo aplastaremos la masa, e iremos dándoles forma de la misma manera que los otros. O bien con cortador de pasas o molde, o con una copa o vaso.
Ya listos, los pondremos en la bandeja, sobre papel para hornear, con el horno precalentado a 160º con calor arriba y abajo, durante unos 25 minutos.


Cuando estén ligeramente duros, ya los tendremos listos, y podremos sacar del horno, para enfriar y decorar.
Una vez fríos, pondremos dos cucharadas de azúcar glass en un colador, y espolvorearemos uno por uno los polvorones.


Y listo. Ya los podremos envolver. Como siempre, en papel de seda. Estos los he puesto en papel naranja, para diferenciarlos de los de canela y limón.
Y este, ha sido el resultado.






¿ Qué os parecen ?
Están tan buenos como los de canela y limón. Tienen una textura deliciosa, y un suave sabor a chocolate maravilloso.
Os animo con ellos. Y si tenéis tiempo y ganas, os animo con todos los que yo e hecho.
Porque aún tenemos días de fiesta por delante. Porque aún queda navidad...

Bon appétit !














Polvorones de canela y limón

Turrón de pistachos, de lacasitos, roscos de vino... ¿ No os falta algo ? El top 10 de las sobremesas navideñas...
Los deliciosos polvorones. En mi casa no son navidades, hasta que yo no los hago.
Y antes de nochebuena, hice unos cuantos para todas las fiestas ( si no se los comen antes de que acaben )
Os dejo aquí mi receta de los polvorones de este año. Deliciosos, exquisitos...impresionantemente buenos. Hacer esta receta, y os aseguro, que vais a triunfar.
Vamos con...

Polvorones de canela y limón :

Ingredientes :

- 350 gr de harina
- 80 gr de almendra cruda molida
- 90 gr de azúcar glass
- 120 gr de manteca de cerdo ibérico
- una cucharada sopera de canela
- unas gotas de esencia de limón
- azúcar glass y canela para decorar




Pasos a seguir :

Preparación previa.

Ponemos en una bandeja de horno, los 350 gr de harina con la almendra cruda molida, y con el horno precalentado. Lo meteremos a 130º durante 30 minutos, removiendo de vez en cuando.
Pasado el tiempo, tendremos la mezcla ligeramente tostada, y podremos sacarla del horno para dejarla reposar.
No debemos tenerla mas de esos 30 minutos, ya que la harina y la almendra podrían amargarse.
Fuera del horno, lo dejaremos reposar de un día para otro.



Amasado y horneado.

Al día siguiente, pondremos la mezcla en un bol, y formando un volcán, pondremos en el centro todos los demás ingredientes.
El azúcar, la canela, unas gotas de esencia de limón y la manteca reblandecida previamente en el microondas.



Iremos mezclando con las manos, hasta conseguir una masa que no se nos pegue a las manos. Las cantidades son muy exactas, pero si os falta algo de grasa porque se os resquebraja, podréis añadir un poquito mas de manteca. Pero muy poco a poco, ya que si os pasáis, quedara demasiado blanda, y os costara darles la forma.
Ya lista la masa, haremos una bola.


En muchas recetas, pone que dejemos reposar en la nevera de una hora a 30 minutos, pero yo he probado la receta con y sin reposo, y salen igual de bien los polvorones, y ya de paso ahorramos tiempo. Es mas, al no estar fría es mucho mas fácil de manejar.
Así que una vez lista la bola, con un rodillo iremos aplanando la masa, hasta alcanzar el grosor deseado, e iremos dándoles la forma con un molde, o con una copa. Podréis elegir el tamaño que queráis.
Yo los hago mas bien pequeños. Me gustan más.

Ya formados los polvorones, los pondremos en una bandeja, sobre papel para hornear. Y ahora, solo nos quedara meterlos al horno, precalentado a 160º con calor arriba y abajo a altura media, durante unos 25 minutos, hasta que estén ligeramente dorados.
Una vez listos, los sacaremos del horno, y cuando estén fríos, los decoraremos.
Pondremos en un tazón azúcar glass y canela por partes iguales, y mezclaremos con una cuchara.



Esa mezcla la pondremos en un colador, e iremos espolvoreando los polvorones de uno en uno.


Una vez listo, solo nos quedara envolverlos en papel de seda. Yo he elegido papel de color azul para diferenciarlos de los otros polvorones que e hecho.
Recortamos los papeles y los envolvemos como más nos guste.


 ¡ Y listo ! ¿ que os parece el resultado ? Son una pasada. Os aseguro que están buenísimos.
Así quedaron una vez envueltos.


Ya tenemos polvorones para las fiestas, quedarán estupendos en nuestras mesas. Espero que os gusten.
Buen provecho.




jueves, 26 de diciembre de 2013

Roscos de vino

Si, ya hemos pasado dos días de fiesta. Tanto hacer planes, preparar cenas, comidas, y lo rápido que pasa todo.
Pero bueno, aún tenemos unos días mas por delante. Una nochevieja, año nuevo y día de reyes.
Así que tenemos que seguir preparando comidas y postres.
Hoy tengo una receta tradicional, que al menos en mi casa les chifla. Un dulce típico y muy navideño.
Esta es mi receta de hoy.

Roscos de vino :

Ingredientes para 25 roscos :

- 360 gr de harina
- 70 gr de málaga virgen. ( lo podéis sustituir por cualquier otro vino dulce que os guste )
- 15 gr de semillas de sésamo
- unas gotas de esencia de anís
- 70 gr de aceite de oliva
- 100 gr de azúcar glass
- azúcar glass para decorar



















Pasos a seguir ;

Empezamos poniendo los 65 gramos de aceite y el sésamo en un cazo, a fuego medio, para dorar las semillas y que saquen el sabor. Lo tendremos unos 10 minutos a fuego medio.


Pasado ese tiempo, lo retiraremos del fuego y dejaremos templar.
A continuación, tamizaremos los 360 gramos de harina, en el bol que vayamos a hacer la masa.



Y seguido, pondremos todos los ingredientes en el centro.
La manteca.
Derretida, o a punto de pomada, ya que si la echamos muy fría, nos costara mezclarla con el resto de ingredientes.


Los 70 gramos de vino.


Los 100 gramos de azúcar glass y unas gotas de esencia de anís.


Y por último el aceite con el sésamo. No hace falta dejarlo enfriar del todo. Con que esté templado ya vale.


Y listo, solo nos quedará amasar con las manos. Primero en el bol, y después en la encimera. Hasta que tengamos una masa homogénea. No es una masa que tengamos que trabajar mucho, es muy sencilla de hacer.
A mi con estas medidas, me ha salido perfecta. No he tenido que añadir ni mas ni menos cantidad, ni de grasa, ni de harina. Os lo digo, ya que en muchas recetas con este tipo de mezclas, siempre tengo que quitar o añadir algún gramo. Pero estas medidas son exactas.
Una vez trabajada, haremos una bola, que quedara tal que así.


Y como no hace falta que repose, ya podremos empezar a hacer los roscos.
Con un rodillo estiraremos la masa, e iremos dándoles la forma con el grosor que nos guste. Si no tenéis moldes para cortar, con una copa o un vaso, podréis hacerlo, y el agujero, mismamente con el dedo. Al fin y al cabo, es lo que tiene lo casero, que no quedan todos iguales, y para mi, es el encanto que le damos los cocinillas.
También podemos hacer churritos y luego unir los extremos. Pero yo me he decantado por la otra opción.



Una vez listos, los pondremos en una bandeja de horno sobre papel especial para hornear. Yo lo he comprado en el eroski. Pero vale cualquiera.



Precalentamos en horno, y los meteremos a 160º  con calor arriba y abajo, hasta que estén ligeramente duros. Que no os engañe la masa, ya que a veces al tocarlos, parecen blandos, pero estarán listos, ya que al enfriar, se quedan crujientes.



Cuando los podamos manejar sin quemarnos, pondremos azúcar glass en un bol, y pasaremos de uno en uno los roscos, para que se impregnen bien y queden blanquitos.


 Y ahora a envolverlos para que se mantengan mejor.
Yo suelo comprar en la fotocopistería, papel de seda. Lo corto con el tamaño que me parece, y los envuelvo a mi gusto.



Y listo, ya los podemos servir. Os aseguro que están impresionantes. En mi casa aún queda alguno, pero porque los voy racionando, ya que si les dejo se comen todos y no me dejan ninguno.
Los tenéis que probar, que son muy sencillos de elaborar y merece la pena hacerlos en casa. Seguro que alucinan vuestros familiares y amigos cuando los prueben.


Espero que os guste mi receta de hoy, a mi me ha encantado prepararlos y comerlos.
Feliz jueves y buen provecho amigos.