Ensalada templada de pollo y queso de cabra.

Miércoles.
Me pregunto una cosa...¿Porqué tiene que hacer mas calor en septiembre que en los meses de julio y agosto? Al menos aquí en el norte... Menudo descontrol!!!!
En fin, pues como llevamos una semanita con unas temperaturas bastante altas, un sol radiante y una sensación de ahogo con tanta humedad, que solo apetece playa y mas playa, lo que mas apetece comer en días así, son cosas ligeras, que no lleven demasiado tiempo prepararlas y que estén ricas por supuesto.
Así que hoy os traigo, una ensalada que preparé para comer con unas tiras de pollo empanado, que me habían sobrado de la cena del día anterior.
Con sobras, podemos preparar grandes platos. Nunca jamas de los jamases, tiréis nada.
Vamos con la simple y riquísima receta de hoy.

Ensalada templada de pollo y queso de cabra.

Ingredientes :

- 3 cogollos de Tudela
- unas tajadas de pollo empanado
- rulo de cabra
- nueces
- piñones
- azúcar
- aceite de oliva
- vinagre balsámico

(En la foto puse sal, pero lo que utilizaremos será azúcar como he puesto arriba)

Pasos a seguir :

Lo primero que haremos, será limpiar los cogollos.
Poniéndolos a remojo en agua con un chorro de vinagre. Pasados unos minutos, aclararemos hoja por hoja con agua, y los pondremos a escurrir.
Una vez secos, los trocearemos y colocaremos en un plato.

A continuación, trocearemos las tiras o tajadas de pollo empanado en pequeños cuadraditos.
El pollo, lo podéis empanar al momento también, ya sabéis, huevo, pan rallado y a freír.
Yo como lo tenía del día anterior, solo he tenido que cortarlo con la tijera, y calentarlo en una sartén antiadherente a fuego medio.

Una vez caliente, lo añadiremos a los cogollos.

Seguido y en la misma sartén, pondremos dos tajadas de rulo de cabra.

Cuando se doren por un lado, les daremos la vuelta. No os asustéis si se rompen un poco. Es lo normal con el calor.
Ya listo el queso por ambos lados, lo colocaremos sobre la ensalada.

A continuación, retiraremos los restos de queso de la sartén con un papel, y después añadiremos unas cuantas nueces. Y con ellas, pondremos un par de puñados de azúcar.
Dejaremos que se derrita, y que se mezcle bien con las nueces.
No queremos una nuez garrapiñada, simplemente, darle ese toque dulce, que tanto se agradece en ensaladas de este tipo.
Una vez doraditas, las sacaremos y repartiremos sobre la ensalada.

Y por último, pasaremos un papel por la sartén para retirar restos de azúcar de esta, y añadiremos los piñones para tostarlos un poco.
Todos los pasos repito, los hemos hecho a fuego medio.
Cuando los piñones adquieran un color tostadito, apagaremos el fuego, y añadiremos a la ensalada.

Por último, solo faltara añadir la vinagreta.
Tan simple como echar un chorrito de vinagre balsámico...

Y después un chorrito de aceite de oliva.

Y volilà. Ya tenemos nuestra súper ensalada lista para disfrutar.
Simplemente espectacular. ¿Qué no os lo creéis? Pues mirad mirad, aquí os dejo el resultado.
Pasen, vean y apunten la receta.

Mmmmm que maravilla, si a mi respectivo que no le gustan las ensaladas, esta le encanto, imaginaos a los que nos gustan como nos vamos a poner.
Espero que esta receta la preparéis en casa y me deis vuestra opinión.
¿Añadiríais algo mas? ¿ Cambiaríais algún ingrediente?
Espero vuestras opiniones.
Os voy dejando amigos. Tengo muchas cositas que hacer.
Mil besos salados, y gracias por estar conmigo por aquí. Nos vemos el viernes!!!!
Feliz Miércoles.










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