Guisantes frescos con bacon, jamón y huevo.

Buenísimos días de viernes compis!!!!!!
¿Cómo va esta semanita? Ya la damos casi casi por finiquitada así que espero que estéis con los ánimos a tope.
Muchos ya estaréis de vacaciones, otros con ellas consumidas, y otros como yo a las puertas de estas.
Hoy estoy muy contenta, puesto que este fin de semana empiezan las fiestas de mi pueblo, y pienso disfrutarlas todo lo que pueda, así que imaginaos que alegría tengo en el body.
Bueno, realmente traigo alegría por partida doble. Por las fiestas que están a puntito de empezar y por la recetaza que os traigo hoy.
Ya era hora de traer un señor plato de esos que son dignos de degustar. Esos que huelen que alimentan, que solo con verlos se te hace la boca agua. De los que se necesita media barra de pan, para empujar, untar y saborear esa salsilla que se queda en el fondo del plato por poca que sea.
Estoy encantada de la vida.
El otro día, me trajeron unos guisantitos frescos. Si, de esos que tenemos que pelar en casa. Y oigan, que cosa mas rica, mas fresca y mas sana.
Después de mucho pensar, decidí cocinarlos de la manera, o al menos de una de las maneras mas tradicionales que yo conozco.
Los clásicos guisantes con jamón.
Para darles otro toque, yo añadí también un poco de bacon ahumado picadito y pimentón dulce.
Bueno, no me lio mas, y os lo cuento todo todito todo a continuación.
Vamos con la receta!!!!

Guisantes frescos con bacon, jamón y huevo.

Ingredientes :

- guisantes frescos
- 3 lonchas de bacon ahumado
- 2 rodajas gorditas de jamón serrano ahumado
- una cebolla
- 2 dientes de ajo
 -2 Huevos Gorrotxategi
- sal
- una pastilla de caldo
- aceite de oliva
- agua
- una cucharadita de pimentón dulce
- pimienta negra molida

Pasos a seguir :

Lo primero que haremos en esta receta, será poner un chorro de aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio.

Mientras este se nos calienta, picaremos muy finitos los dos dientes de ajo, y añadiremos a la sartén.

Después haremos lo mismo con la cebolla. La picaremos todo lo que podamos, y la pondremos a pochar junto con el ajo, a fuego medio para que se nos haga despacito.

Mientras se nos hace la cebolla, picaremos el bacon y el jamón en pequeños trozos.

Cuando la cebolla este dorada y blandita, añadiremos el bacon y el jamón, y saltearemos a fuego medio durante unos 4 minutos.

Seguidamente, añadiremos los guisantes y mezclaremos todo bien.

Una vez todo unido, pondremos la cucharadita de pimentón dulce...

La sal...

Y media pastilla de caldo. Es preferible tener que añadir sal después, que poner demasiada ahora, y que nos quede salado.

Mezclamos todo bien, y añadimos un vaso y medio de agua aproximadamente. Que justo cubra los guisantes. Ni mas ni menos.

Subiremos un poco la temperatura del fuego hasta que rompa el hervor. Después lo bajaremos a temperatura media, y tendremos cociendo de 10 a 12 minutos.
Como bien sabéis, los guisantes frescos, se hacen un poco antes que los congelados.

Mientras se nos hacen los guisantes, escalfaremos los huevos.
Lo primero será poner en una cazuela un buen chorro de agua, para después ponerla a fuego fuerte para que hierva.
Mientras se calienta el agua, pondremos en un vaso, un trozo de film transparente.

 Con el mismo film, haremos un cordón no demasiado grueso para atar el saquito después.

Pondremos en en film el huevito cascado y un poco de sal.

Recogeremos el paquetito, le daremos unas vueltas y cerraremos con el cordón que hemos preparado antes, dándole un par de nudos.

Así con todos los huevos que escalfemos.

Cuando el agua este hirviendo, añadiremos los huevos y los tendremos 5 minutos de reloj cociendo.

Una vez cumplido el tiempo, los sacaremos para quitarles el plástico.
Cortaremos con la tijera los extremos, y retiraremos el film con mucho cuidado, ya que la yema estará líquida y si no tenemos cautela y paciencia la podemos romper.
Cuando tengamos los huevos escalfados hechos y sin plástico, los guisantes deberán estar listos de sobra, así que solo nos quedara servir, habiendo previamente, probado el punto de sal de los guisantes, y rectificando la sal si es necesario añadir un poco mas.

Ahora, solo nos queda emplatar. Simplemente poniendo en el fondo del plato unas cucharadas de guisantes, y un huevo escalfado encima, bañado con un pequeño chorro de aceite de oliva y un poco de pimienta negra molida, haremos de un plato sencillo, todo un manjar de estrella michelin.

¿Que no os lo creéis? Pues pasen y vean el resultado. Es una maravilla!!!

¿Bueno que me decís? Un auténtico placer. Un plato 10. Sano, ligero, delicioso y facilísimo de preparar.
Espero que os guste esta receta. Que la preparéis en casa, y que consumáis guisantes frescos, que son una auténtica maravilla, y si tenéis peques en casa, les encantara ayudaros a pelarlos.
Bueno amigos, me despido ya de vosotros. El domingo nos vemos, con una tarta fría sencilla y deliciosa.
Diferente y buenísima. Así que aquí nos vemos en un par de días.
Feliz fin de semana, mil besos salados y buen provecho!!!!!





         "Complicar una receta, es la mejor forma de disfrazar la falta de talento de un cocinero"
                                                                                                       Michel Bras